Tres millones
La memoria es frágil. Y no sólo por el paso de la edad, sino por el proceso natural de la vida, que se va llenando, de forma progresiva, de nuevos recuerdos que dejan en segundo plano aquellos que hoy eran más recientes.
La memoria es frágil, en lo personal y en lo colectivo, y por eso es necesario hacer un ejercicio continuo de selección de aquello, que de forma natural iría quedando en el olvido, para rescatarlo, y posicionarlo en un lugar preeminente de nuestros recuerdos, porque nos interesa, porque así lo queremos. La memoria es frágil, y requiere de ejercicio, y ese ejercicio no es neutral ni aséptico, sino, muy al contrario, es intencional y singular. Recordamos lo que queremos, lo que nos produce placer, o lo que nos ayuda a crear narrativas, historias, nuestras historias, que nos singularizan y nos hacen únicos.
Somos lo que somos porque nos hemos construido de recuerdos que configuran nuestra personalidad, como individuos y como sociedad, y sin duda esos recuerdos condicionan y condicionarán nuestras........
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