La ruta de los programas ESG. Una perspectiva empresarial
En los últimos 20 años, los programas de ESG (por sus siglas en inglés de Ambiental, Social y Gobernanza) han evolucionado de ser iniciativas secundarias a convertirse en un componente esencial para las empresas que desean prosperar a largo plazo.
Al comienzo de mi carrera, las conversaciones sobre estos temas no estaban bien estructuradas y carecían de marcos de referencia globales claros. Hablábamos de responsabilidad social corporativa, filantropía o proyectos comunitarios, pero rara vez logramos integrarlos en una estrategia coherente que influyera en las decisiones empresariales. Según un informe de KPMG, en 1993 solo el 12% de las empresas informaba sobre prácticas de sostenibilidad; para 2024, este porcentaje ascendió al 96%, destacando la importancia creciente de la sostenibilidad en la gestión corporativa.
Hoy, la situación es diferente y también más desafiante. La presión de inversionistas, consumidores y comunidades ha convertido estos programas en un eje estratégico que debe permear cada nivel de la organización. Dejó de ser deseable (nice to have) para convertirse en un estándar transversal con prácticas mínimas indispensables que debe integrar la industria. Un estudio de Deloitte indica que el 83% de los inversionistas a nivel mundial integran criterios de sostenibilidad en sus análisis, mostrando cómo ESG ya influye en la evaluación del desempeño corporativo.
Un aprendizaje clave es que ESG no debe verse como un conjunto de acciones aisladas para cumplir........
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