Cómo tu mente te hace creer que las cosas no cambian y protege tu creatividad
¿Alguna vez te has sorprendido diciendo “ya sé cómo es” sobre una persona o situación… y luego te equivocas? Esa seguridad precipitada proviene de lo que refiero como bucle heurístico de creencias nominales: convertimos acciones fugaces en etiquetas fijas y navegamos el mundo con mapas que envejecen rápido. En tiempos de la Inteligencia Artificial y consumo exprés, esta costumbre amenaza el músculo vital de la era digital: la creatividad.
Richard Bandler y John Grinder mostraron que la mente generaliza, distorsiona y descarta datos para ahorrar energía. El atajo más tentador es la nominalización: “Ana es impulsiva”, en vez de “actuó impulsivamente ayer”. Ese pequeño cambio gramatical crea una identidad inmutable que buscamos confirmar para sentir coherencia. Cada vez que Ana levanta la voz, Jorge festeja su acierto interno y refuerza el bucle. Igual pasa con las etiquetas sociales—“centennials superficiales”, “mercado volátil”—que sustituyen la observación constante por clichés cómodos. El costo es claro: cuanto más rígida la etiqueta,........
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