El régimen criminal de Tabasco y su impacto nacional
Lo que está en juego en las acciones (selectivas) de la presidenta Sheinbaum para investigar y perseguir las redes de corrupción y criminalidad en las que han participado algunos miembros de la coalición gobernante no podría ser más importante. Está en disputa, nada más y nada menos, el rumbo hacia el que avanzará el proceso de consolidación del nuevo régimen político mexicano.
La semana pasada analicé las tres áreas cruciales para la estabilidad política de México que estarán moldeadas por las decisiones que el gobierno de Sheinbaum tome en el combate contra el huachicol fiscal: la relación bilateral con Estados Unidos (que puede ser de mayor subordinación o mayor autonomía), el balance de poder y las reglas no escritas de la relación cívico-militar, así como la correlación de fuerzas en la coalición gobernante (y, por consiguiente, el nivel de influencia que tendrán cuadros mafiosos en Morena y el gobierno).
Dedicaré esta columna a plantear las áreas estratégicas en las que incidirán las decisiones que la presidenta y su círculo cercano tomen en el caso de Adán Augusto López y Hernán Bermúdez Requena.
Primero una aclaración: es evidente que la presidenta no cruzará algunas líneas rojas y que las acciones contra la corrupción, el tráfico de influencias y los vínculos criminales de miembros de la coalición gobernante siempre serán selectivas y arbitrarias, balanceando consideraciones........
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