Contagio reputacional. Cuando la crisis de uno daña a otros
En los últimos meses, las crisis que enfrentan empresas o actores políticos en México han abierto espacios de incertidumbre que otros aprovechan con rapidez. En un contexto polarizado, marcado por la opacidad y la competencia feroz, basta una señal de vulnerabilidad para que terceros la utilicen como excusa para filtrar información, insinuar vínculos o propagar rumores.
Aunque no existan pruebas, el daño se instala. Porque en tiempos de desconfianza, el rumor puede más que los hechos, y la sospecha basta para contaminar.
Tres casos recientes lo ilustran con claridad:
La reciente designación del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de Intercam, CIBanco y Casa de Bolsa Vector como posibles canales de lavado de dinero activó una alarma legítima. Pero su impacto fue más amplio: en cuestión de horas, medios y redes comenzaron a especular sobre otras instituciones financieras que ni siquiera fueron mencionadas, pero que comparten perfil, sector o vínculos de negocio........
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