Dignidad y ética
En un pequeño cuaderno anoté: “las dos grandes metas de la ética son bregar por la justicia y aspirar a la felicidad”. La cita es vieja. Desconozco la fuente. Me gusta la idea; con el tiempo he pensado en agregar una más, “fomentar y/o respetar la autonomía”. Pueden añadirse muchas entradas más; las actuales, justicia, felicidad y autonomía son suficientes para este pequeño ejercicio y para los quehaceres de la ética laica.
El desencuentro entre ética y poder político y religioso es inmenso y, seguramente, irremediable. Basta repasar nuestra nación y las miserias viejas y vivas del PRI/PAN/PRD/Morena y otros diferentes y casi iguales por no decir idénticos.
Poder y política conforman un binomio maligno. Ellos, los políticos,........
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