Compartir es un error
Ayer cumplí seis meses de ser mamá. Y aunque ese título sigue engrosándose al tiempo que aumentan el peso, el ingenio y la gracia de mi bebé, prácticamente, sigo sin mostrarla en redes sociales. La razón: no he permitido que mi ego le gane a mi consciencia sobre lo que implica compartir información sobre mi hija, un ser que ni siquiera es consciente aún de su propia existencia.
Aunque parece ser más lo que ganamos que lo que perdemos publicando en las redes sociales nuestro día a día, el riesgo al que nos exponemos con ello puede salirles bien caro a quienes más amamos: nuestros hijos. El sharenting, como es llamado en inglés el concepto con que se hace referencia a compartir........
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