TiranÃa, democracia y populismo
La democracia y la tiranÃa constituyen formas de gobierno, opuestas, pero con resultados y mecanismos institucionalizados que dan lugar a gobiernos bajo los cuales las sociedades se desarrollan, fortalecen la legitimidad de quienes ejercen la autoridad y desde luego el poder, en este entendimiento se trata de procesos diferenciados, se puede tener poder sin autoridad, o bien autoridad sin poder, también puede ocurrir que en una misma persona coexistan las dos capacidades.
En mucho, estos atributos atienden sobre todo a principios y a una suerte de legitimidad moral que abona en el deber, el sometimiento, la subordinación, obediencia, la guÃa âformal o pragmáticaâ que provee este halo de consistencia que ostenta la autoridad de quien ejerce el poder hacia los gobernados. Ambos conceptos indiscutiblemente están ligados al derecho.
Aristóteles clarifica que el ejercicio del poder debe sustentarse en el cumplimiento de la ley y no necesariamente en el uso de la fuerza para cumplir son esa obediencia de las masas, con amplias dimensiones, pues no solo representa el uso de la fuerza fÃsica, también involucra mecanismos formales o informales derivados de esta fuerza........
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