menu_open Columnists
We use cookies to provide some features and experiences in QOSHE

More information  .  Close

Otra ley ridícula

4 0
30.07.2025

Iván Tabares Marín

Es una tradición muy arraigada en nuestro Congreso de la República buscar soluciones a los problemas sociales mediante la creación de una nueva materia en los colegios, cargada de buenas intenciones, pero sin ningún soporte serio con el propósito mezquino de engañar a los mal informados electores y que termina siendo una ley ridícula e inútil.

En este caso, la nueva cátedra obligatoria de Educación Emocional busca potenciar las habilidades para la vida y desarrollar competencias en este campo. Como estamos en el gobierno de un aprendiz de dictador convencido de que el Tren de Aragua comete todo tipo de delitos por falta de amor, o que a los terroristas de la Primera Línea hay que sacarlos de la prisión, o que a los jóvenes en riesgo de volverse delincuentes hay que darles un millón de pesos mensuales para que no lo sean, es imposible imaginar las barbaridades que van a venir sustentadas en esa norma. En este gobierno no se hace nada significativo, incluidos los saqueos del erario, sin la orden de Gustavo Petro.

Las emociones no son problemas pedagógicos, aunque los consejos de los maestros pueden servir de forma marginal. Las amonestaciones de psicólogos, psicoanalistas y psiquiatras seguramente ayudan porque se trata de especialistas con una preparación adecuada que no pueden lograr los maestros en un curso de tres meses. Al contrario, pueden agravar el problema y, en algunos casos, llevar al suicidio a ciertos enfermos mentales.

El núcleo central de las emociones se adquiere a través de la........

© El Diario