Adiós al fogueo. A partir de ahora, fuego real. Se acabaron las probaturas y demás experimentos propios de una pretemporada porque la campaña 2025/26 alza el telón este domingo. La Gimnástica Segoviana estrena el nuevo curso con la firme intención de retornar cuanto antes a la categoría perdida, una Primera RFEF que supo a poco por el fugaz paso de una temporada precedente en la que no pudo mantenerse en la categoría de bronce del fútbol español. Un nuevo escenario cuya primera fecha es a las 18.00 horas de este domingo en feudo propio, una Albuera cuya hinchada ya ha demostrado que quiere llevar en volandas a su anfitrión. Un primer choque en el que los azulgranas se miden a todo un desconocido, la UD Sámano cántabro (Castro Urdiales), todo un misterio por su condición de novato que pisa por primera vez Segunda RFEF.

La Segoviana se presenta a la cita con la condición de favorito, al menos a priori, porque, aunque el tiempo pondrá a cada uno en sitio, parece haber confeccionado un proyecto deportivo interesante con el propósito de un nuevo ascenso. Plantilla y técnico están convencidos de tal posibilidad, también en el seno del club y en una afición que ha respondido este verano pese a que todo descenso comporta cierto desasosiego. Con el nuevo técnico Iñaki Bea a la cabeza, sustituyendo a una figura querida en la tierra como Ramsés, el conjunto segoviano quiere dar una grata alegría a su parroquia en este primer encuentro de la temporada regular. Siempre es positivo comenzar asegurando los tres puntos en el zurrón, y más si se trata de un inicio como local que puede motivar un incremento de espectadores en los sucesivos partidos.

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