Rosalía tiene que denunciar
Opinión | Al azar
Rosalía. / AP
Todo el mundo recuerda el día lejano en que abordó despreocupado el New York Times, para descubrir en la portada de la vieja dama gris a la última divinidad de la metrópolis, un Miguel Adrover de quien nada se sabía en la isla que lo parió. El ascenso meteórico fue seguido de un aterrizaje no menos violento, como en una novela de Tom Wolfe o de su imitador francés, Balzac.........
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