El uso y el abuso del poder
La mayoría de las personas está familiarizada con el término "poder" y de igual modo con "autoridad", que parecen estar relacionados. Algunos conocedores afirman que el poder es la capacidad de un individuo para influir en el comportamiento de otras personas y el término autoridad se usa a menudo para designar el poder cuando es percibido como legítimo. Otros consideran que el poder es tener la expedita facultad o la firmeza de hacer algo. En todo caso, asociamos la palabra poder como sinónimo de mandar, es decir quien lo tiene domina, ordena, resuelve, impone, decreta, dirige, preceptúa, estatuye, envía, consigna, exige a un subordinado o manifiesta voluntad de hacer algo.
Por lo general el poder es ostentado por un jefe, un militar, un policía, un ejecutivo, un juez, un gobernante, es decir quienes hacen posible las cosas o un evento, así mismo, quienes determinan si algo ocurre o no. Es por eso que el poder está vinculado a quien tiene la posibilidad de hacer uso de la autoridad para mandar a que se lleve a cabo un acontecimiento o se haga algo de acuerdo con un mandato. Es por eso que se habla del buen uso del poder cuando la ordenanza conduce hacia la realización de algo positivo, contrariamente, el mal uso o abuso del poder, cuando la orden conduce hacia algo negativo. Si se trata en el aspecto social vinculado al cumplimiento del deber de un burócrata, referimos que el abuso de autoridad, también conocido como abuso de poder o abuso de funciones públicas, son prácticas de intercambio social en la que se evidencia una conducta basada en una relación de poder, jerarquizada. En otras palabras, es una situación donde la autoridad o el individuo quien tiene poder sobre otros, debido a su posición social, jerarquía, conocimiento o riqueza, utiliza ese poder para su propio beneficio. En el caso de un funcionario, el abuso de poder es la conducta de aquel que valiéndose de su........
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