No por esto, voy a dejar de creer en Dios
Para las religiones del mundo, cada ser humano tiene su Dios. Ese Dios se presenta en cada ser como su suprema autoridad de creencias. Figura abstracta que fue creada por el mismo hombre, para controlar a sus semejantes y, supuestamente, liberarlo de las maldades y felonías del mismo hombre, del mismo componente humano. Garantizarle un cielo y desterrarlo a un infierno, según sus propios comportamientos. Aunque ese cielo y ese infierno tienen su lugar aquí mismo en la tierra. Entre esas diversidades de dioses se ha creado la misma contención inconmensurable de aceptar que si se cree en un Dios, a él hay que aferrarse, lo que supone que, el dogmatismo que inspira ese Dios, tu Dios rechaza de manera categórica la no creencia del otro Dios; el Dios que puede ser de usted.
Según el........
© Aporrea
visit website