Pienso, luego existo. ¿Y si la IA también lo hiciera?
Desde que Descartes formuló su célebre «Pienso, luego existo», el pensamiento ha sido el pilar de nuestra identidad. Reflexionar, dudar, analizar… todo eso nos define como seres humanos. Pero en estos tiempos, donde la inteligencia artificial responde con rapidez, donde parece que ya no hace falta pensar tanto porque alguien (o algo) lo hará por nosotros, me pregunto: ¿seguimos existiendo del mismo modo?
Es tentador ceder a la comodidad de respuestas instantáneas, a la certeza de datos procesados en segundos, a la ilusión de que el conocimiento puede delegarse sin pérdida. Pero, ¿y si en ese acto de abandono perdemos lo que realmente nos define? No es una cuestión teórica para mí. A lo largo de mi........
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