Tatequieto, por William Anseume
La interesante palabra que sirve para darle título a esta entrega puede tener por lo menos dos orientaciones interpretadoras: una dirigida a la inmovilidad y otra que sugiere la amenaza de un golpetazo que detenga a quien acciona malamente. Obviamente, me interesa más la segunda opción hoy, aquí.
Es un término que se usa con el tiempo con menos frecuencia. Ha sido desplazado, creo, por otros más agresivos y vulgares, como coñazo. El tatequieto envuelve una singular sutileza, en medio de la amenaza. Por supuesto, de la oferta del tatequieto puede escalar la idea de que, si no se queda tranquilo el sujeto o los sujetos operantes en el acto........
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