La pudrición de los López
“Ya está saliendo toda la pudrición”. Con esa frase se regodeaba el secretario de Gobierno de Tabasco, José Ramiro López Obrador, al referirse al caso de La Barredora, el escándalo que vincula a su hoy adversario político Adán Augusto López con el crimen organizado. Pero el propio “Pepín”, como se le conoce al hermano del expresidente, forma parte de la misma pudrición que corroe al entorno familiar de Andrés Manuel López Obrador.
En días recientes se reveló que José Ramiro posee 13 ranchos con una extensión total cercana a las 600 hectáreas. De acuerdo con su declaración patrimonial, el valor conjunto de estas propiedades asciende a más de 8.6 millones de pesos. Los ranchos fueron adquiridos entre 2018 y 2024, justo durante el sexenio de su hermano Andrés Manuel López Obrador. Los reportes indican que las compras se realizaron en efectivo y de contado, lo que despierta serias sospechas sobre el origen de los recursos y el crecimiento inexplicable de su patrimonio.
Pepín fue acusado de peculado y desvío de recursos públicos durante su gestión como alcalde de Macuspana, a través del proyecto “Macuspana Siglo XXI”, financiado con un préstamo gestionado ante Banobras. Los recursos no fueron transparentados ni debidamente comprobados. En la práctica, de todo el proyecto solo se concretó parcialmente la construcción de un puente sobre el río Puxcatán, a cargo de una........
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