Hay pueblos pequeños en el mapa, pero grandes en la memoria de quienes los habitan. Cabanillas del Monte es uno de esos lugares: una comunidad que, aunque administrativa y oficialmente pertenezca a Torrecaballeros, nunca ha dejado de ser dueña de sí misma. Porque la identidad no se decreta, se construye a pulso, con fiestas, con sudores, con música y con la obstinación de los vecinos que se niegan a que su pueblo se convierta en mera nota al pie.
El sábado 27, la campana sonará para la misa y la procesión en honor a San Miguel, santo guerrero que acosa al diablo con la misma determinación con que aquí se protege lo propio.

Tras la liturgia, “La Esteva” traerá danzas, y el aperitivo en la Casa Barrio recordará que la fraternidad se mastica, se........

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