La liturgia del despojo
—¡Colombia, la iguana acaba de colapsar! Braulio, no sé si sea capaz de levantarse… ¿Es sangre? ¿Qué es? ¡Se desangra la luchadora!
—Es un verdadero combate el que presenciamos hoy, y ustedes, amigos radioescuchas, lo viven a través de las ondas hertzianas de Radio San Silvestre. La Ciénaga, imponente al fondo de esta arena abrasadora, da fe de lo que aquí se gesta. El sol azota sin clemencia al público enardecido por la empolvada sangre, que certifica —como sello de garantía— la sensacional contienda que, a esta hora, entretiene al Magdalena Medio entero.
Nos encontramos en la zona alta de este templo del combate —y les juro, amigos oyentes— que hasta aquí, a tres metros de la acción, se oye el jadeo extenuado de una iguana maltrecha que se........
© Vanguardia
