En casi todo el planeta las sociedades se están encogiendo. La realidad demográfica parece conducir ineluctablemente a una tasa de nacimientos cada vez más modesta, insuficiente para renovar poblaciones con cada vez más viejos. Los seres humanos estamos desobedeciendo la primera de las órdenes divinas: eso de creced y multiplicaos no está, decididamente, en los primeros lugares de la lista de prioridades de los jóvenes. Parece que la pediatría no será la especialidad más nutrida. Los que sí se van a multiplicar son los geriatras… y los médicos veterinarios.

Una realidad que tiene menos primeras planas que los desastres naturales, económicos y bélicos, pero cuyas consecuencias van más allá, mucho más allá del........

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