Violenta sociedad
El martes pasado por la tarde, la piloto de la FAP Ashley Vargas se perdió entre los aires, mares, y tierras de Pisco y Paracas. Para mí ha sido particularmente impactante porque justo el día viernes 16 había estado en Pisco manejando por la carretera surreal y pintoresca que va al pie del mar en San Andrés. Pasé por delante de la base FAP N.o 51 y vi los avioncitos. Apenas unos kilómetros más allá, por la misma carretera, vi la Capitanía de Pisco, la lancha reliquia patrullera que tienen en la puerta, de adorno. Y me quedé pensando precisamente en lo duro que es perderse, porque ese mismo día, y el día anterior, nos........
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