Nadie piensa diferente
El asesinato de Miguel Uribe me puso a pensar mucho, no solo sobre el dolor de su familia, sino por una frase que vi que alguien escribió que a Miguel “lo mataron por pensar diferente”. Al principio, hasta lo sentí como una verdad, pero luego me di cuenta que esa frase, que parece un homenaje, en realidad es un veneno para la sociedad. Aceptar que alguien “piensa diferente” es legitimar la idea de que existen pensamientos correctos y pensamientos equivocados. Dividimos el mundo en ortodoxos y herejes, en buenos y malos, en quienes deben ser escuchados y quienes deben ser silenciados. Esa clasificación moral del pensamiento es la semilla de la violencia que históricamente ha vivido Colombia.
Para mí nadie piensa diferente. Solo pensamos. Cada postura, cada ideología, no es más que el reflejo del entorno: la familia, la educación, la clase social, el barrio, el país. Las creencias no son la........
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