Orlando Viera-Blanco: La llave de la libertad
“La soberanía no puede convertirse en un antídoto contra la represión, la persecución y la transgresión a la dignidad humana. Tampoco en un acicate para proteger criminales o delincuentes de delitos internacionales”.
La reciente liberación de 5 venezolanos que se encontraban en la embajada de Argentina en Caracas es un hito importante en el orden público internacional. Una operación definida por el Secretario del Departamento de Estado de EEUU como “rescate de rehenes”, lo cual acentúa la legalidad, legitimidad e incluso conveniencia de estos actos, cuando al tiempo que se solicita soberanía y representación de estado, esos conceptos-de fachada diplomática-son utilizadas para justificar un orden represor.
Los DDHH están por encima de la no intervención y la soberanía cuando los pueblos son sometidos por crímenes de lesa humanidad, agresión, actos de guerra o genocidio. Así lo estableció la doctrina de la responsabilidad de proteger [R2P] desarrollada por Canadá [2005] por encargo del otrora S/G de la ONU, Kofi Annan.
Es oportuno dar un repaso histórico a casos emblemáticos de rescates, capturas, repatriaciones; asilos sin salvoconductos o violaciones contra sedes diplomáticas, que pulsan la retina por el remozamiento del deber de proteger. Los derechos que condicionan la dignidad del hombre son los más vulnerados.
Rescates quirúrgicos. La operación Garibaldi…
Las operaciones de asilo y rescate en embajadas han sido momentos decisivos en la historia contemporánea, reflejando la complejidad de la diplomacia internacional y la seguridad. Estas intervenciones-a menudo ejecutadas con precisión quirúrgica- han salvado vidas y protegido a individuos perseguidos, pero también han planteado desafíos éticos y legales significativos.
La Operación Garibaldi (1960) que condujo a la captura captura del criminal de guerra Nazi Adolf Eichmann, es un ejemplo notorio de captura trasnacional “no autorizada” por el país receptor. El servicio de inteligencia israelí, Mossad, llevó a cabo una operación clandestina para capturar a Adolf Eichmann, uno de los principales responsables del Holocausto, quien se encontraba en Argentina bajo una identidad falsa. La operación, conocida como «Operación Garibaldi», consistió en secuestrar a Eichmann y trasladarlo a Israel para ser juzgado por crímenes contra la humanidad. Este caso marcó un hito en la lucha contra la impunidad de los crímenes de guerra y la violación de DDHH.
Otra extracción de rescate de rehenes fue la operación Entebbe en Uganda. En 1976, un avión de Air France fue secuestrado por miembros de la organización Células Revolucionarias y el Frente Popular para la Liberación de Palestina, siendo llevado a Entebbe, Uganda. El gobierno israelí [Mossad], planificó y ejecutó una operación quirúrgica para liberar a los rehenes. La intervención duró 53 minutos. Resultó en la liberación de 102 rehenes y eliminación de los secuestradores sin la pérdida de vidas israelíes.
Una de las operaciones reconocidas como impecable fue la denominada ‘Chavín de Huántar’ [unidad élite conformada por comandos del Ejército y la Marina de Guerra del Perú] que culminó con el rescate de rehenes en Perú. En 1997, miembros del Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) tomaron la residencia del embajador japonés en Lima, Perú, reteniendo a 71 rehenes. El gobierno peruano-bajo el mando del presidente Alberto Fujimori-autorizó una operación militar para liberar a los rehenes. La operación «Chavín de Huántar» involucró a 142 comandos de las FFAA........
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