Humberto García Larralde: Bancarrota
El término “bancarrota” se refiere a una situación en la cual una empresa o un individuo carece de los recursos con qué hacerles frente a sus compromisos financieros. Su condición es de insolvencia, ya que el valor de sus activos no alcanza para cubrir el de sus pasivos, ni para generar los ingresos que permitieran su refinanciamiento. Está en quiebra, excluidas sus posibilidades de acceder al crédito. En países como EE.UU. las empresas disponen de mecanismos de protección –el capítulo 11 de su Ley de Quiebras— para una liquidación ordenada de sus activos en aras de atender a sus acreedores y/o para acordar con éstos una reorganización de sus operaciones que satisfaría sus demandas. Además, los dueños de las empresas suelen ampararse en figuras jurídicas de responsabilidad limitada que preservan sus activos personales de ser embargados.
La figura de la bancarrota, en estricto sentido, no se aplica a una nación. Es inconcebible que un país no disponga de los activos, así sean porciones de su territorio, con qué pagar sus deudas. De hecho, aunque parezca insólito, países europeos en el pasado vendieron territorios suyos para afrontar necesidades financieras. Por ejemplo, Rusia le vendió Alaska a EE.UU. en la segunda mitad del siglo XIX. Previamente, a comienzos de ese mismo siglo, Napoleón le había vendido el inmenso territorio de Louisiana –nombrado así por el Rey francés, Louis XIV–, mucho mayor que el actual estado que lleva ese nombre, ya que abarcaba buena parte de las tierras conocidas de la ribera occidental del Mississippi. Pero tales prácticas han caído en desuso. Luego de la II Guerra Mundial emergió un consenso entre estados de no aceptar la alteración de fronteras entre países impuestas por la fuerza. Pero, por Putin y por las pretensiones de Trump de anexar a Groenlandia, parece que el imperialismo está de vuelta, poniendo en peligro este principio de inviolabilidad territorial.
Venezuela representa un caso extraño. Tiene recursos suficientes para hacerles frente a sus deudas y para atender sus necesidades de desarrollo, incluyendo la capacidad y disposición de sus ciudadanos, tanto dentro como fuera del país, para acometer esfuerzos con tales propósitos.........
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