Vicky Dávila se lanzó y movió la política. Llena un vacío, el que había en la derecha, el de la falta de un candidato(a) con audiencia y adhesión. Y Vicky las tiene, es mediática.

Con ella se abrió el telón de la campaña presidencial, una campaña que quizás se construya desde el espectáculo a un público que le gusta el espectáculo, el escándalo y las historias en donde más que programas y propuestas, al público elector le llama la atención los personajes -buenos y malos- los relatos a contar, las tensiones y delaciones, en fin, las emociones, la intriga y la entretención. Y ahí Vicky ha demostrado, desde la revista Semana, maestría.

Lo hace muy bien. Es decir, tuvo la capacidad, desde la revista (habrá que ver si la tienes desde la........

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