Del chaleco al traje de luces
Calles sin luz durante el apagón. / Alberto Paredes / Europa Press
Mi amigo Paco es persona dotada para los trabajos manuales, eso lo sabe todo el mundo, incluido yo, que le llamo para colgar cuadros y arreglar cisternas. Envidio esas habilidades. Aunque a veces la cosa no funciona. Mire, si no, un día de esta semana en que decidió colgar una lámpara. Ufano tras la trabazón de cables, bajó de la escalera, restableció la corriente y le dio al interruptor. No funcionaba. Y lo que es peor, no funcionaba, según comprobó, ninguna otra luminaria o aparato eléctrico. Toqueteó eso que antes se llamaba «los plomos»; pero nada. Llamó a un amigo electricista: no pudo conectar. Así que se dedicó a otros menesteres para los que no es necesaria la luz artificial. Hasta que, pasado un rato, llegó su mujer, a la que manifestó compungido que algo había hecho mal, provocando la domiciliaria oscuridad. Ella le tranquilizó, manifestándole, con cierta ironía, que su afición por los trabajos manuales había provocado un apagón en toda España –menos islas y plazas de soberanía- y Portugal. Si todo el mundo tuviera su capacidad de autocrítica, mejor nos irían las cosas. Creo.
En fin, así estamos. Las plagas de Egipto fueron diez. Ya me he descontado, pero aún no hemos llegado. Lo que es muy molesto es que el partido egipcio enseguida se preocupa de echar la culpa a la Moncloa. Yo estaba preocupado por si la cosa duraba: ya veía a Ayuso convocando a sus cayetanos y borjamaris y valles en una esquina del barrio de Salamanca insultando al Gobierno de la nación por privar de cerveza fría a la soberanía popular. Pero no les dio tiempo.
La verdad es que yo, tan poco dotado, en la edad adulta tirando a mayor, para las cosas del espíritu nacional, me sentí orgulloso con la reacción social: dejando aparte a la facción de cuñados electricistas y a los siniestros cultores de paranoias en red, la respuesta ciudadana y técnica fue ejemplar. Lo que algunos olvidan es que para arreglar los desaguisados no es........
© Información
