El chip de la vacancia se introdujo en el ADN nacional. Al menor problema, un grupo de peruanos chilla vacancia, llevándonos cuesta abajo. La historia lo corrobora: 7 presidentes en 9 años. Es delirante, antidemocrático y enfermizo. La vacancia es apuntalada con marchas de protesta. Siempre son violentas, siempre la extrema izquierda (Movadef), apoyada por la izquierda progresista, busca muertos. Ocurrió al inicio del gobierno de Dina Boluarte. La violencia fue tal que produjo 48 muertos. Las consignas en estas algaradas, propias del terrorismo urbano, son las mismas: que caiga el régimen democrático de turno. El sector progresista quiere un reemplazo presidencial de su preferencia y lanza nombres sin pudor. La subversión busca el cambio de sistema: asamblea constituyente. Ambos comparten el “que se vayan todos”. Algunos sectores de derecha coquetean con el planteamiento. Dios los cría...
Muchos se preguntan si es legal o no que se pida subvertir el orden constitucional. Porque el propósito del desmadre ocurrido es que caiga el presidente........

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