En Argentina, las elecciones del pasado 7 de septiembre, en las que ganó el peronismo kirchnerista en la provincia de Buenos Aires —13 puntos de diferencia—, fueron letales para Javier Milei. Su liderazgo quedó en entredicho. Sin embargo, lo bueno para él fue que esa onda expansiva negativa llegó pronto a Donald Trump, quien emitió un mensaje de alivio prometiéndole que hará lo que sea necesario para ayudarle a estabilizar la economía argentina. Fue un punto de inflexión que generó el evento electoral. Milei gobernaba marginando al Congreso y subestimando a la oposición. Los resultados de los primeros tiempos de su gestión impulsaban optimismo y euforia. Se registraba superávit fiscal, la inflación caía hasta llegar a menos del 5% después de estar en 20% por mes, la economía crecería y el consumo también gracias al retorno del crédito y el dólar barato. Empero, otras medidas adoptadas para el manejo de los índices macroeconómicos extremadamente desbalanceados exigían del Gobierno un........

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