Televisión y natalidad
Opinión
En la España de los setenta se bromeaba, y mucho, a propósito de los estrictos horarios de la televisión. La Primera, indefectiblemente, cerraba a medianoche. Nos ponían el himno con fondo de imágenes laudatorias del Generalísimo y, de ahí, a una eterna cartela llamada "carta de ajuste" hasta el día siguiente. Así que, a esa hora a falta de otros alicientes, todos a la cama que hay que madrugar. Y, claro, tan pronto, costaba coger el sueño, y no eran pocos los que se ponían a hacer hijos. Entonces, no se utilizaban expresiones malsonantes.
El chiste era que el Régimen, tan rudimentario, utilizaba esta medida para que a la patria no le faltaran hijos. Lo cierto es que el Régimen tenía la mano larga, pero no tanto como para meterse en la cama. Había otras medidas, mucho más sutiles y efectivas pero más drásticas, para traer españolitos al mundo.
Ha sido la medida anunciada la semana pasada por Putin la que me ha trasladado a aquellos tiempos remotos. El sátrapa........
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