Es hora de ponernos serios con el desempleo juvenil
Esta tendencia no solo refleja el desaliento de cientos de jóvenes que han dejado de buscar trabajo ante la falta de oportunidades reales, sino que también evidencia el fracaso de las políticas públicas para dinamizar la economía y generar empleos dignos. Cuando la población joven en edad de trabajar se retira del mercado laboral, ya sea por frustración o por falta de condiciones adecuadas para insertarse en él, se pierde capital humano valioso y se profundizan las desigualdades.
Esta contracción silenciosa de la participación laboral debería alarmar tanto a las autoridades locales como a los actores económicos, pues detrás de los números hay jóvenes sin ingresos estables, jóvenes sin futuro y una sociedad que, poco a poco, se desconecta del circuito........© El Nuevo Día
