Besos, caricias y abrazos legítimos
A decir verdad, los abuelos y abuelas han sido, a lo largo de generaciones, pilares emocionales fundamentales en la vida de los más pequeños. En su rol de cuidadores y transmisores de valores, encuentran en el contacto físico afectivo —un beso en la mejilla, un abrazo protector, una caricia en el cabello— un lenguaje genuino para expresar amor, ternura y presencia. Desde esta perspectiva, comparto plenamente la postura de que el ámbito penal no debe intervenir cuando tales gestos se hallan desprovistos de cualquier intención lujuriosa y se inscriben, más bien, en el terreno sagrado del afecto familiar.
Desde mi perspectiva, la distinción entre actos de connotación sexual y manifestaciones legítimas de cariño no solo es necesaria, sino fundamental para preservar la salud de las relaciones familiares. Así lo consagra expresamente el artículo 33, parágrafo 2°, de la Ley 1801 de........
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