Recursos naturales: la riqueza que podría destruirnos
No es una guerra de trincheras, ni de cañones, sino de minerales y contratos. Se libra en los desiertos de litio de América Latina, en los pozos petroleros de Asia Central y en las cuencas hídricas cada vez más secas del Medio Oriente. Y aunque muchos no la vean, sus consecuencias nos afectan a todos: desde el precio del gas hasta la estabilidad política de una región entera.
Tomemos como ejemplo el litio. Ese metal ligero, esencial para las baterías de nuestros celulares, computadores y carros eléctricos, se ha convertido en el nuevo oro blanco. Bolivia, Chile y Argentina concentran más del 50% de las reservas globales. Esto ha puesto a estos países en el centro de una competencia feroz entre grandes potencias y empresas multinacionales. Lo que en principio parece una bendición, una oportunidad de desarrollo para nuestros vecinos del sur, también puede convertirse en fuente de tensiones sociales, conflictos ambientales y una dependencia económica peligrosa si no se gestiona con........
© El Informador
