El liderazgo descalzo
Ese sencillo hábito –quitarse los zapatos– ha sido para mí una metáfora viva del tipo de liderazgo que defiendo: uno más humano, horizontal, sincero. En el universo corporativo donde los códigos de vestimenta, los rangos y las paredes de vidrio siguen imponiendo jerarquías sutiles, el liderazgo descalzo aparece como una provocación elegante. ¿Y si liderar no fuera tener más, sino soltar más? ¿Y si dirigir a otros no requiriera ponernos por encima, sino a la par? El liderazgo descalzo no es nuevo, aunque ahora tenga nombre: nace de la tierra, de la ancestralidad, de caminar junto a los demás sin imponerse.
Este modelo ha sido reivindicado por pensadoras como la australiana Tina R. Davidson, quien sostiene que “el liderazgo descalzo es aquel que tiene el coraje de quitarse las armaduras y andar con el........
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