El precio de volar, cambiando dignidad por 'comodidad".
El protocolo de seguridad no es tal, es un show absurdo donde usted, ciudadano decente, debe despojarse de sus zapatos, su cinturón, su dignidad y, si se descuida, hasta de su paciencia. Le escanean todo, le tocan todo, le hacen abrir la maleta, le confiscan la colonia como si fuera un explosivo líquido. Mientras tanto, toneladas de droga cruzan puertos y fronteras con la eficiencia de Amazon Prime. Pero usted, sí, usted y su desodorante en barra, son tratados como amenaza de alto riesgo.
Y luego está el eterno drama del equipaje. Si su maleta pesa 24 kilos, le exigen que pase dos a otra. No importa que ambas maletas terminen en la misma bodega del mismo........
© El Informador
