Recordando al nefasto Jim Jones
Si mis lectores no lo recuerdan, Jim Jones fue un líder demente que logró constituir una secta con seguidores que creían ciegamente todas sus promesas absurdas, que con el beneplácito del gobierno de Guyana conformó en una franja de tierra cedida por dicho gobierno una pequeña población con un mini aeropuerto a orillas del río Kaituma a la que en honor a su nombre bautizó “Jonestown”. Allí Jim Jones desde su llamado “Templo del Pueblo”, con promesas fantásticas de imposible cumplimiento mantenía a un obediente grupo de personas conformado por familias enteras con sus niños, la mayoría de estos, norteamericanos decididos a hacer lo que su líder les pidiera. Hasta que un aciago día su........
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