Sí, el Man está vivo
Me gustan los signos de la liturgia de la Vigilia Pascual con la que la comunidad católica celebra la Resurrección de Jesucristo: fuego, agua, palabra y pan. Son realidades ordinarias que, en su sencillez, comunican una vida que trasciende, que da sentido, que despierta. Son los símbolos con los que expresamos la certeza más profunda del corazón: el que fue asesinado en la cruz está vivo, no se quedó en el frío del sepulcro.
¿Y eso qué tiene que ver contigo, conmigo, con nosotros, humanos del siglo XXI? Creo que la Resurrección nos revela que hay una manera de vivir que conduce a la plenitud, al sentido, a la verdadera felicidad. Como Pedro (Hechos 2,14-41; 3,11-21), también yo creo que la........
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