“¡2025 sorpréndeme!”, se leía en los medios de comunicación digital de Ciudad Juárez el último día de 2024. Esta frase, tan común en redes sociales al finalizar cada año o incluso cada mes, refleja un deseo universal: la expectativa de que algo positivo, inesperado, asombroso o fuera de lo común suceda. Más allá de su tono informal, esta expresión encierra una profunda emoción relacionada con lo desconocido, manifestando un anhelo de salir de la rutina, desafiar las expectativas y vivir nuevas y mejores experiencias.

Al igual que otras frases de anticipación, “¡2025 sorpréndeme!”, no solo alude a un deseo personal, sino que también refleja un sentimiento colectivo. En una ciudad como la nuestra interconectada y llena de incertidumbres, cada uno de nosotros se enfrenta a la llegada de un nuevo ciclo con una mezcla de curiosidad y esperanza. Esta última, en su forma más pura, no es solo un deseo abstracto de que las cosas mejoren, sino una estrategia positiva frente al futuro, una actitud abierta ante lo que está por venir.

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La esperanza es una de las características más........

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