Así quedará registrado para eterna memoria en su tumba sencilla “Franciscus”, en latín, y en la iglesia de Santa María la Mayor, el lugar de descanso eterno del Papa que acaba de partir a la Morada Eterna el lunes de Pascua. La noticia nos impactó después de verlo el domingo impartiendo su última bendición “Urbi et Orbi”, que tanto recordamos los católicos del mundo. Le vimos recorrer por última vez la Plaza de San Pedro, agradeciendo de corazón a sus colaboradores: “Gracias por traerme hoy a la plaza”, y partió al día siguiente a la Casa del Padre, que lo llamó después de cumplir un ciclo en la vida de la Iglesia, que en dos mil años de historia vivió varios períodos de crisis, sobreviviendo por la protección de Jesús de Nazaret........

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