Nos dejó “Don Milton”, el último As de copas
Tarija siempre ha jugado juegos en los que ha perdido. La historia de esta región es una mezcla de abundancia, promesas incumplidas y oportunidades desperdiciadas. Pese a las millonarias regalías del gas y una población que merecía un mejor destino, nos extraviamos en decisiones equivocadas, esperando respuestas que nunca llegaron. Pero el verdadero potencial siempre estuvo en la tierra y en quienes supieron cultivarla; incluso en medio de esos tropiezos, la naturaleza supo esconder un secreto, un as bajo la manga: Un “póker de Ases” que tejieron con sudor el futuro de esta región y convirtieron un valle de cárcavas en una “pequeña Toscana”, como lo definió el periódico Wall Street hace pocas semanas, en una comparación generosa.
Julio Kohlberg Chavarría, Lucho Granier Ballivián, Carlos Molina Pereira y Milton Castellanos Espinoza, fueron los arquitectos más importantes de esta transformación. Cada uno, desde su trinchera, con visión y tenacidad, levantaron las columnas de la industria vitivinícola boliviana. Julio, desde Bodegas Kohlberg, nos enseñó que tradición y calidad van de la mano. Lucho, desde Casa Real........
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