Cara a cara
Los hechos. Una menor de 13 años con más de 20 heridas en el cuerpo y luchando por su vida en el hospital Japonés. Una madre desesperada rezando por la vida de su hija. El padre de la acusada llorando a cántaros, pidiendo perdón y asegurando que su hija es buena y que atacó a su compañera de colegio porque había sido amenazada por terceros. Estos dramas, que parecen sacados de una........
© El Deber
