El negocio de enfermarse
Por estos días, hablar de licencias médicas es sinónimo de fraude. Pero lo que está en juego va mucho más allá del dato que encendió las alarmas -los más de 25 mil funcionarios públicos que salieron del país mientras decían guardar reposo-. Lo que revela ese número, en realidad, es el síntoma de un sistema hecho, literalmente, para que se abuse de él.
Me propuse entender cómo funciona. Identificar sus nudos críticos y pensar qué cambios podrían empujarse para recuperar el sentido original de este beneficio: proteger al trabajador enfermo. Porque lo que nació como una prestación social, hoy se ha convertido, en muchos casos, en un verdadero incentivo al engaño. Y no solo cuando hay irregularidades explícitas. Incluso en situaciones legítimas, el diseño actual promueve conductas distorsionadas en todos los actores:........
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