Hablemos señor alcalde
Por: Amadeo González Triviño
Los procesos históricos no nos engañan. En cada periodo electoral los candidatos tienen la virtud de deambular por calles, veredas y cantinas, abrazando a por doquier a cuanto transeúnte encuentran, repartiendo besos y siendo generoso en el lenguaje para con sus ocasionales contertulios, prometiendo ésta vida y la otra y manifestando su voluntad de sacrificio por las comunidades o al menos con algunos sectores populares, a los cuales, nunca antes había visitado y como osados conquistadores, llegan a impresionar y comprometer un voto, claro está, que por delante van los dadivosos que previamente han repartiendo bultos de cemento, dulces o confites, según las preferencias del zinc o de la baldosa que se necesite.
Una vez elegidos, tienen la virtud como las comadrejas, de ocultarse y buscar a toda costa evitar volver a los sitios frecuentados o al menos contestar el saludo de aquellos que un día, se dieron la pela por un voto, para compensar un tamal, un aguardiente o una promesa que como es de esperarse, nunca se ha de cumplir y nunca se cumplirá.
Hemos tratado de buscar dentro del........
© Diario del Huila
