Cómo terminó sus días la madre de Martí
“Casi nadie se ha preocupado por mí”, mandó a decir en una carta a una amiga la madre del Apóstol de Cuba, ya siendo una anciana
Fotos: Archivo de BOHEMIA
En momentos sumamente difíciles de la salud y la economía familiar de la mujer que trajo al mundo a José Martí y Pérez, apenas recibió el respaldo merecido para enfrentar su pobreza.
La madre de nuestro héroe mayor en la recta final de su vida, sufrió mucho por no poder ver fotos de su hijo ni leer ni uno solo de sus geniales versos. / Archivo de BOHEMIATan crítica situación agobiaba la mente y el alma de Leonor Pérez Cabrera, ya con muchos años encima; enferma, ciega…; al enterarse de ello Carmen Miyares, viuda de Manuel Mantilla, le envió una carta con el fin de consolarla un poco y darle alguna esperanza.
Tuvo la triste señora la urgente necesidad de pedirle a una de sus hijas que le leyera y contestara su mensaje inmediatamente. He aquí el texto íntegro de aquella memorable misiva, respetando la excesiva repetición de palabras y los defectos de su redacción.
Habana, 4 de marzo de 1898.
Querida Carmita: Me dice Ud. que le escriba algo de mi vida. Hace tiempo que quiero hacerlo, pero desde que mis ojos se han nublado por completo, y tengo que valerme de otra persona, sufro mucho, no me queda más que una esperanza, y es que el oculista quiere hacerme una operación, pues él cree que podré ver algo.
Pero yo no me atrevo por la situación en que me encuentro, pues en estos casos se necesitan algunos recursos, y yo hoy no los tengo, pues mis hijos viven hoy muy reducidos y yo no puedo disponer de una habitación, ni puedo pagarla, así le hago a usted esta confesión, por si puede hablarle a alguna persona que quiera y pueda remediar mi triste situación, pues no sé para........© Bohemia
